PRENSA

Identifican «en rojo» las casas de los refugiados en una ciudad de Gran Bretaña

Las agresiones con piedras, cócteles molotov, excrementos y animales muertos contra las casas de quienes pretenden recibir refugio en Gran Bretaña, se han convertido en algo común en Middlesbrough, una vieja y apacible ciudad del nordeste de Inglaterra, hacia donde el gobierno conservador de David Cameron derivó a miles de migrantes. Lo que ocurre es que, como en los años del nazismo en Alemania, las viviendas de los refugiados –en su mayoría procedentes de Siria y Europa del este– tienen sus puertas pintadas de rojo para distinguirlas de las demás. El diario conservador The Times, de Londres, denunció ayer que se trata de un verdadero caso de “apartheid”: 155 de las 168 casas ocupadas por demandantes de asilo están identificadas de la misma manera. La medida discriminatoria fue denunciada en el Parlamento local como “un odioso caso de xenofobia similar al aplicado en la Alemania nazi, cuando el régimen de Adolf Hitler, obligaba a los judíos a pintar una Estrella de David amarilla en las puertas y ventanas de sus casas y lugares de trabajo”. De esta forma, las viviendas en las que están alojados los refugiados se diferencian fácilmente, y pueden ser objeto de acciones de los grupos racistas, que las han atacado con frecuencia tirando piedras, huevos, excrementos, animales muertos y artefactos incendiarios, escribiendo frases xenófobas o dibujando en las paredes el logotipo del Frente Nacional, el partido británico de extrema derecha. Ante la gravedad de la denuncia, el gobierno de Cameron decidió al fin intervenir, después de casi dos años de conocida la primera denuncia.