PRENSA

Embajada de Israel: acto con poca presencia oficial

El acto por el aniversario 21º del atentado contra la Embajada de Israel dejó renovados reclamos de Justicia por parte de los familiares y de las autoridades de ambos países. En medio de la fuerte controversia generada con la comunidad judía por el memorándum firmado con Irán, el Gobierno decidió enviar al vicecanciller, Eduardo Zuaín, quien no participó de los discursos. Como es tradicional, el acto se llevó a cabo en la esquina de Suipacha y Arroyo, donde funcionaba la sede diplomática, y arrancó a las 14.50 con el sonido de una sirena y la lectura de los nombres de las víctimas.

El primer orador fue Ran Curiel, sobreviviente del atentado y actual director general adjunto del Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel, quien garantizó que el Gobierno de su país “continuará accionando” para que los dos atentados sean esclarecidos. “Me es importante señalar aquí que la Argentina e Israel, argentinos e israelíes fueron víctimas del terror, y ( ambos atentados) deben ser investigados y juzgados”, añadió.

Además, el funcionario remarcó que es “una obligación moral y nacional” hacia los familiares de las víctimas del atentado como hacia los sobrevivientes “una valiente y rápida acción a fin de completar la investigación para así llevar a la justicia a los responsables”.

El atentado ocurrió el 17 de marzo de 1992 y dejó 29 víctimas y más de 200 heridos. En diciembre de 1999, la Justicia argentina dictó un fallo en el que dio por acreditado que fue realizado por la organización terrorista Hezbollah. Y en 2006 reiteró la orden de captura de los prófugos Imad Mughniyah (murió en 2008 en Damasco) y José Salman El Reda. Sin embargo, la investigación realizada por la Corte Suprema no tiene detenidos ni juzgados.

Por su parte, la embajadora de Israel en la Argentina, Dorit Shavit, advirtió que el atentado modificó “para siempre” la vida de los argentinos y los israelíes. Y se quejó de que “no todos luchan por esta causa”. En representación del Gobierno porteño, la vicejefa María Eugenia Vidal, instó a “sostener la memoria, no para quedarnos en el pasado sino para aprende de él”. La ceremonia también contó con la presencia de la embajadora de Estados Unidos en la Argentina, Vilma Martínez, el gran rabino de la Argentina, Shlomo Benhamú, e importantes líderes de la comunidad judía argentina.