PRENSA

La DAIA va al Congreso para tratar de frenar la ley

En una carrera contrarreloj, la dirigencia judía busca quebrar el quórum del oficialismo en Diputados, ‎donde pasado mañana un plenario de comisiones debatirá el Memorándum de Entendimiento con Irán por ‎la AMIA. La carrera es para revertir hechos que parecen consumados a partir de la media sanción del ‎Senado, la semana pasada, y el intento del oficialismo de convertirlo en ley el miércoles. Aunque en las ‎propias filas kirchneristas admiten que están con los números justos para alcanzar los 129 diputados ‎necesarios para garantizar el inicio de la sesión.‎
Por ello, la cúpula de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) se trasladará mañana a ‎la Cámara baja para visitar las oficinas de los legisladores del Frente para la Victoria y de sus aliados ‎clave, que no respondieron los pedidos de audiencia.‎
Despacho por despacho, con aviso y sin aviso, allí estarán el presidente de la entidad, Julio Schlosser, su ‎vice Waldo Wolf y su secretario general Jorge Knoblovits, quienes vienen encabezando un delicado ‎equilibrio de la institución que representa a las organizaciones judías de todo el país. Surgida de las ‎elecciones del año pasado, su conducción no quiere confrontar con Cristina Kirchner, pero al mismo ‎tiempo rechaza de plano el acuerdo con Irán. Es la postura mayoritaria en la colectividad, salvo algunos ‎sectores de familiares de las víctimas del atentado.‎
‎“Les vamos a explicar que las cuestiones de Estado no pueden escudarse en las cuestiones partidarias sino ‎a la conciencia de cada uno, sobre todo tratándose de algo tan sensible y caro a los valores de la sociedad ‎argentina como la justicia, que debe ser igualitaria para todos los ciudadanos que habitan este suelo”, dijo ‎a este diario uno de los directivos de la DAIA.‎
La entidad ya se ha entrevistado o tiene previsto hacerlo con casi todo el arco opositor. Lo hicieron con el ‎FAP y radicales. Este lunes irán a la DAIA legisladores del PRO, el PJ disidente, Patricia Bullrich (Unión ‎por Todos) y Felipe Solá, que recibió una llamada del kirchnerismo –al que suele apoyar– y contestó que ‎no les facilitará el quórum. Supo este diario que días atrás hubo un discreto encuentro de la DAIA y la ‎AMIA con el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri.‎
A las visitas que harán este lunes a los despachos oficialistas, se sumó el pedido de un grupo de ‎familiares que no pudo hablar en el Senado. Lo encabezan Luis Czyzewski, Mario Averbuch y Sofía ‎Guterman, quienes enviaron cartas a los presidentes de las comisiones, para poder manifestarse allí. Los ‎tres están también en contra del acuerdo firmado con Teherán. Y como en el debate de comisión de la ‎Cámara alta, el canciller Héctor Timerman también comprometió su presencia en Diputados. ‎
La clave para el oficialismo será lograr quórum para que arranque la sesión del miércoles. A cuatro ‎diputados ya no los cuentan como propios (Jorge Yoma, Facundo Moyano, Omar Plaini y Blanca Blanco ‎de Peralta). Tiene otras bajas: Carlos Eliceche (de licencia) y Beatriz Mirkin (renunció). Ahora opera para ‎que no falte nadie y para alcanzar el número con aliados. En la mira están el fueguino Jorge Garramuño, ‎el salteño Alfredo Olmedo, la catamarqueña Mariana Veaute y el bonaerense Rubén Ledesma, entre otros.‎