“La Shoá es un momento de la historia pedagógico y hay una clave en este genocidio, en el armenio, en la dictadura argentina del ’76, en estos hechos dolorosos que se repiten, y es la construcción de otro extraño, amenazador, deshumanizado. Ante el triunfo de la intolerancia la tarea en las escuelas es celebrar las diferencias, las diferencias no anulan los vínculos sino que los desafían”, aseguró el ministro de Educación, Alberto Sileoni. Sileoni participó del Seminario Internacional Experiencias en Educación y Memoria sobre el Holocausto: reflexión y conmemoración, junto al presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti; la presidenta Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, y el rabino de la Comunidad Bet-El, Daniel Goldman, acompañados por representantes de Alemania, Brasil, Chile, Costa Rica, Países Bajos, Perú, Uruguay, Venezuela, y sobrevivientes del Holocausto. “Ayer murió Albano Harguindeguy, y algunos diarios titularon murió el asesino, el genocida y otros publicaron murió el ex ministro del Interior. Por tanto, ahí hay una discusión y una tarea para la escuela”, explicó Sileoni.
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