PRENSA

Críticas a Bolivia por Irán, mientras Cristina se veía con Evo

Como un ritual que se repite año tras año, la sirena volvió a sonar a las 9.53 de la mañana, y se encendieron 85 velas para recordar a cada uno de los muertos. Pero ningún familiar de las víctimas subió al escenario por primera vez desde que la colectividad judía se reúne a las puertas de la reconstruida sede de la AMIA, para repudiar el atentado terrorista del 18 de julio de 1994, y pedir la justicia que nunca llegó. En medio de fricciones internas en la comunidad por la relación con el Gobierno, el presidente de la mutual, Guillermo Borger, fue el único orador del acto. Pidió que la Presidenta redoble el reclamo ante la ONU contra el gobierno iraní para que entregue a ocho acusados de cometer el atentado, al tiempo que cuestionó al gobierno de Bolivia por su estrecha relación con Irán, en momentos en que Cristina Kirchner se reunía ayer con su colega Evo Morales, en Cochabamba. Precisamente por su viaje a Bolivia, la Presidente no asistió al acto de ayer en el que la representaron su jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, y los ministros Julio Alak (Justicia) Nilda Garré (Seguridad), y Alberto Sileoni (Educación). Tampoco asistió el jefe del gobierno porteño, Mauricio Macri, quien estuvo representado por su vice, María Eugenia Vidal.