PRENSA

Una semana para hacer memoria. Por Claudio Avruj*

Comenzamos una semana en la que coinciden dos conmemoraciones de enorme significación para la humanidad. Por cuestiones de calendario, primero recordamos el levantamiento del Gueto de Varsovia, que comenzó el 19 de abril de 1943 , fecha emblemática de la recordación de la Shoá, el genocidio perpetrado por el régimen nazi; y culminamos con la conmemoración del Genocidio Armenio, llevado a cabo por el régimen de los Jóvenes Turcos, el día 24 de este mes. La historia nos muestra, sin embargo, que los sucesos se produjeron en orden inverso. Y cabe preguntarnos, entonces, ¿qué hubiese pasado si el conjunto de las naciones hubiera prestado atención seriamente, con conciencia social y política, de lo que significó el Genocidio Armenio? El 22 de agosto de 1939, Adolf Hitler interrogó a sus generales para alentarlos a cometer el genocidio contra el pueblo judío: “¿Quién habla hoy del aniquilamiento de los armenios?” Y esta pregunta cínica, casi 80 años después, continúa resonando. Interpela a nuestra conducta como hombres libres y nos interroga sobre si entendemos en profundidad, como generalmente decimos que lo hacemos, el valor del ejercicio permanente de la memoria y de la educación para la memoria. (…) *Subsecretario de Derechos Humanos del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.