El antiguo líder neonazi sueco Anders Högström, condenado a dos años y ocho meses de prisión por ser el cerebro del robo de la inscripción Arbeit macht frei del antiguo campo de concentración de Auschwitz, partió ayer hacia Suecia, donde cumplirá la condena impuesta por la Justicia polaca.
Högström fue escoltado por agentes polacos hasta el aeropuerto de Balice, cerca de Cracovia, donde fue transferido a la Policía sueca, responsable de su custodia durante su traslado a Suecia. El ciudadano sueco, de 34 años, fue condenado por el alto tribunal de Cracovia encargado de juzgar el robo del letrero Arbeit macht frei («El trabajo libera») el pasado mes de diciembre.
La Policía recuperó la inscripción días después, troceada para facilitar su ocultación en el jardín de una casa de campo ubicada en el centro de Polonia. En la operación policial fueron arrestadas cinco personas, todas ellas de nacionalidad polaca, que permitieron la posterior detención de Högström, inductor del robo.
Los daños sufridos por la inscripción original, una pieza de hierro forjado que había sido dividida en tres trozos por los ladrones, obligó al museo del campo de concentración a ubicar temporalmente una copia del letrero. Desde que tuvo lugar el robo, el museo reforzó las medidas de seguridad para frenar otros posibles actos criminales en el lugar, que comprende unas 200 hectáreas e incluye varios edificios.
Entre 1940 y 1945, la Alemania nazi exterminó en Auschwitz-Birkenau a cerca de 1,1 millón de personas, un millón de entre ellas judías, además de gitanos, polacos no judíos y prisioneros soviéticos.