Las inscripciones antisemitas en el frente de la sinagoga del movimiento ortodoxo Jabad Lubavitch de esa ciudad, causaron el rechazo de la comunidad. «No es la primera vez que ocurre y no tenemos miedo», dijo el rabino que vive en el lugar. La AMIA expresó su «más enérgico repudio»
«Durante la noche pintaron dos nombres con tiza, que no entendí, sobre el portón del garaje y una esvástica grande sobre la vereda», declaró a la Agencia Judía de Noticias (AJN) el rabino Moishe Fridman, quien vive en la planta superior de esa finca.
«No es la primera vez que ocurre y no tenemos miedo», agregó el religioso.
Fridman, quien conduce ese Beit Jabad hace 25 años, detalló que «hubo dos pintadas anteriores, sobre la pared y la puerta, y una esvástica en frente de la Kehilá (sede de la comunidad) hace dos años».
El rabino explicó que su sinagoga, a la que asisten decenas de personas, no tiene custodia policial.
Por su parte, el presidente de la Asociación Israelita de Bahía Blanca, Claudio Baril, señaló que las autoridades policiales «sospechan de jóvenes de izquierda como los autores del hecho» porque las pintadas incluyeron una insignia anarquista.
Horas antes de Shabat, el presidente de la AMIA y del Consejo de Comunidades Israelitas de la República Argentina (Vaad Hakehilot), Guillermo Borger, expresó su «más enérgico repudio» y aseguró estar «en permanente contacto con el presidente de la comunidad judía local, a la espera de un dato que esclarezca» la agresión antisemita.
Se estima que en esa ciudad portuaria viven unas 400 familias judías, que conforman una comunidad centenaria.