Israel manifestó ayer en forma oficial su «decepción» y «malestar» ante los anuncios formulados días atrás por la Argentina y Brasil sobre el reconocimiento de un Estado palestino en las fronteras de 1967. No obstante, el viceministro de Relaciones Exteriores de Israel, Danny Ayalon, expresó en forma categórica: «Nuestras quejas no están dirigidas a la Argentina y Brasil sino a los palestinos», dijo. «Si ellos dedicaran a las conversaciones con nosotros el diez por ciento del esfuerzo que hacen para atacarnos diplomáticamente en el exterior, ya habrían resuelto todos los problemas. Pero en lugar de sentarse directamente con nosotros, algo a lo que se oponen, van a buscar soluciones por todo el mundo para que otros presionen a Israel.» El número dos del Ministerio de Relaciones Exteriores se reunió ayer con los principales medios latinoamericanos en Israel -incluyendo La Nacion- y dijo que «hay una falta de comprensión, lamentablemente, en Brasil y la Argentina, respecto de los problemas en cuestión». Inmediatamente, Ayalon dijo que «sería bueno que ambos países observen a Estados Unidos y Europa que tienen la sabiduría y la experiencia para decir que no puede haber una solución forzada, que la solución no puede venir de Brasilia ni de Buenos Aires, sino que debe ser elaborada aquí, en la región».
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