La policía israelí detuvo a dos muchachos a los que acusa de ovocar por negligencia el más grave incendio en la historia del país, que desde el jueves amenaza a la ciudad de Haifa y demandará al menos una semana en ser sofocado contando con la numerosa ayuda internacional solicitada por el primer ministro Benjamin Netanyahu. El fuego, que arrasó 5.000 hectáreas con cinco millones de árboles, causó además 42 muertos y obligó a evacuar de sus hogares a 17.000 israelíes. En la madrugada de ayer las llamas alcanzaron el moshav (una granja colectiva similar a un kibutz) de Nir Etzion; Ein Hod, un conocido poblado de artistas; y la reserva natural Ha¡-Bar, todos en los alrededores de Haifa. LOB ARRESTOS. Los detenidos son dos adolescentes drusos de 15 años oriundos del poblado de Issafiya quienes durante un pic nic habrían encendido una fogata para cocinar y no verificaron si se había apagado antes de retirarse del lugar. Israel tuvo que recurrir a la ayuda internacional para combatir el fuego porque carecía de los medios para hacerlo por su cuenta. En conferencia de prensa en Haifa, el premier Netanyahu salió al paso de la indignación por la falta de preparación del país con el argumento de que no conoce «ningún Estado que haya podido acabar con un fuego así sin ayuda exterior».
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