Instalar una mezquita en el barrio de Once cuando la Justicia argentina ha señalado a los fundamentalistas musulmanes como responsables del atentado, no creo que sea del agrado de los familiares de las víctimas. Lamentablemente, esto coloca en una situación muy incómoda a todos los musulmanes que no tienen culpa alguna de que su propia gente haya apelado a los fundamentos religiosos para matar. No me cabe duda que, de darse en Argentina una hipótesis similar a la que hoy divide a Nueva York, encendería un debate intenso en toda la colectividad y, particularmente, dentro del Consejo Directivo de la DAIA como su representación política, emergiendo en ese núcleo específico las mismas dos posiciones que vemos en Estados Unidos: aquellos que se opondrían a que -el fundamentalismo islámico se instale muy cerca en un gesto de provocación, casi ofensivo, y aquellos que advertirán que no se puede generalizar y culpar a todo el islam por la responsabilidad de unos pocos. Semejante generalización no pasa por nuestras mentes. Pero hay que considerar que el fundamentalismo está arraigado dentro de toda las religiones, inclusive la judía. No debemos olvidar jamás que el responsable de asesinar al Premio Nobel de la Paz Isaac Rabin en Israel fue un judío, hoy preso, juzgado y condenado. De ahí que es clave señalar y rechazar todos los-fundamentalismo dentro de todas las religiones. (*) Presidente de la DAIA.
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