La presidenta de Argentina, Cristina Fernández, y legisladores latinoamericanos asistieron al acto por el 15 aniversario del atentado contra la mutualista judía de Buenos Aires, que en julio se aplazó por la epidemia de gripe A que afecta al país.
Al acto, que se realizó frente a la reconstruida sede de la AMIA, donde en 1994 murieron 85 personas, acudieron parlamentarios de este país, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay, Perú y Uruguay, además de sobrevivientes y familiares de las víctimas.
El director del Congreso Judío Latinoamericano, Claudio Epelman, destacó que los parlamentarios se reunirán en esta capital para «analizar elementos jurídicos» que permitan combatir el terrorismo. «Buscamos sensibilizar a los legisladores a partir del contacto con los familiares de las víctimas y con los dirigentes comunitarios», subrayó.
Entre los legisladores que fueron convocados se destacan Rodrigo Álvarez, titular de la Cámara de Diputados de Chile, y Miguel Abdón Saguier, presidente del Senado paraguayo.
También visitarán Buenos Aires los diputados Mauricio Rands (Brasil), Esteban Valenzuela y Ramón Farías (Chile), Carlos Acha (Paraguay) y Luis Rosadilla (Uruguay), así como los senadores Orlando Fiorotto Sánchez (Paraguay) y Rodrigo Lara Restrepo y Jorge Enrique Vélez (Colombia). Tras el acto los legisladores tienen previsto entrevistarse con las máximas autoridades de la AMIA y de la DAIA.
El viernes 17 de julio, un día antes de que se cumpliera el decimoquinto aniversario de la voladura de la AMIA, la comunidad judía argentina recordó a las víctimas con un mensaje transmitido por la cadena nacional de radio y televisión.
Ese homenaje sustituyó al acto que cada año se realiza para recordar a los fallecidos y renovar el pedido de justicia en el populoso barrio de Balvanera, ya que las autoridades comunitarias resolvieron evitar concentraciones masivas por la epidemia de gripe A.
Perpetrado el 18 de julio de 1994, el de la AMIA fue el segundo de los ataques contra objetivos judíos en Argentina y sucedió al atentado que destruyó la embajada de Israel en Buenos Aires, que ocurrió el 17 de marzo de 1992 y provocó la muerte de 29 personas.
La causa que investiga el atentado contra la AMIA se reactivó a finales de mayo, cuando la Corte Suprema ordenó al máximo tribunal penal del país profundizar la investigación sobre la «conexión local» del ataque, que causó unos 300 heridos. La Justicia argentina atribuye la responsabilidad del atentado a Irán y al grupo extremista Hezbollah, y ha pedido la captura internacional de nueve iraníes, entre ellos el ex presidente Alí Akbar Rafsanjani, y del colombiano Samuel Salman El Reda, acusado de ser parte de la «conexión local».
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