PRENSA

Los amantes en las arenas del cercano oriente por Victor Zajdenberg

Todos sabemos que, entre los seres humanos, existen amantes
cultos y violentos, leales e infieles, sinceros y falsos, nobles y traidores,
platónicos y pragmáticos, y así podríamos seguir ahondando en nuestra especie y
determinando infinitas formas de convertirse en amantes. Lo mismo sucede en el
Cercano Oriente (y en el mundo entero) donde los Estados formales y ONG´s
informales que son conducidos por hombres (a veces con damas detrás) y mujeres
(en ocasiones con varones atrás) surge esta categoría (la de los amantes) en
las Relaciones Internacionales que transforman a enemigos, supuestamente
eternos, en aliados, socios y también, porque no, en algo parecido a alguno de
los tipos de amantes ya descritos.

Es lo que sucede actualmente entre Arabia Saudita (sunita) y
el Estado de Israel donde un acérrimo enemigo de ambos, la República Islámica
de Irán (chiita), ha logrado esta clase de milagro que estipula que “mi enemigo
menos peligroso que mi enemigo más poderoso se convierte en mi amigo” (o aunque
sea a corto plazo en un amante). Esta original situación ha derivado en que
todo el campo sunita del Cercano Oriente le “cortara los víveres” (armas,
misiles, dinero, apoyo, etc.) al Hamas, la Organización terrorista usurpadora
de la Franja de Gaza, provocando una parcial distención en la zona sur de
Israel.

Asimismo la actual Rusia de Putin, continuadora de algunas
políticas heredadas de la antigua URSS (Unión Soviética) que en 1979 invade
Afganistán, un país musulmán, del cual se tiene que retirar con bochorno en
1989 gracias a la ayuda otorgada a los muyahidines por los EE.UU, vuelve al
Cercano Oriente para salvarle el pellejo a Assad, el Presidente Dictador de
Siria, en una alianza inimaginable con la teocracia chiita iraní y el Hezbollah,
el emporio terrorista del Líbano; todos ellos con un superabundante prontuario
de atentados y asesinatos  a sus propios
ciudadanos y a objetivos en el extranjero, entre ellos la Embajada de Israel y
la AMIA en Argentina. En forma simultánea este indescifrable amorío está
logrando conservar cierta estabilidad en la frontera norte del Estado de Israel
debido a la sangrienta Guerra Civil y Militar en Siria (2011-2018) y por la
anuencia de Rusia, acordada a raíz de las seis visitas realizadas por Netanyahu  a Putin en los últimos años.

Tampoco deberá olvidarse el intenso “affaire” triangular que
se produjo entre Obama, ex Presidente de los Estados Unidos, Merkel, todavía
Canciller de Alemania y Rohani, el pseudo Presidente de Irán que condujo a la
firma de un deleznable Memorándum supuestamente anti nuclear (obviando el
desarrollo misilístico) por el cual a Irán se le descongelaban 100 mil millones
de dólares y la industria alemana les comercializaba productos por otros 100mil
millones de euros, acuerdos comerciales que los alemanes tenían preparados con
anticipación y que los iraníes utilizaron en forma brillante para doblegar
cualquier exigencia de contraprestación o intercambio; es decir recibieron todo
sin dar nada a cambio.

Mas no todo es oro lo que brilla ya que, en el Cercano
Oriente, estamos tratando con “amantes” no siempre cultos, leales y fieles y es
por ello que en las Naciones Unidas siguen atacando a Israel, en la UNESCO
prosiguen desconociendo la verdad histórica de Jerusalém, las ONG´s islamistas
continúan atentando contra los israelíes y las ONG´s occidentales prosiguen
desvirtuando la realidad cotidiana con informes falaces, inicuos comunicados y
propiciando el BDS (boicot, desinversión y sanciones) a la única Democracia del
Cercano Oriente: Israel.