La Asociación de Defensores del Pueblo de la república, a través de su sede en la ciudad balnearia, firmó un convenio con el Instituto nacional contra la discriminación y el racismo (Inadi) para instalar una oficina de recepción de denuncias y asistencia a las víctimas de xenofobia y racismo en esa ciudad. Es una medida impulsada ante al reclamo de distintas organizaciones sociales por la seguidilla de hechos violentos protagonizadas por bandas neonazis, que han vandalizado espacios públicos y agredido a representantes de la comunidad judía. El representante de la Defensoría del Pueblo de la Nación Alejandro Amor dijo que “es un compromiso nuestro denunciar estos hechos delictivos en la justicia” y remarcó que “no son hechos para mirar al constado, son delitos, son delincuentes, no se puede a agredir por la condición sexual o religiosa”.
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