PRENSA

Masacre de EI en un campo de refugiados

Los despiadados ataques del grupo jihadista Estado Islámico (EI) están convirtiendo en un infierno la vida de los palestinos en el campamento de refugiados de Yarmuk, en las afueras de Damasco. Según denunció ayer un diputado palestino-israelí, alrededor de 1000 personas fueron asesinadas por los jihadistas. «Estado Islámico es un movimiento fascista y ahora está publicando fotos de cabezas cortadas, incluida la decapitación del imán de la mezquita partidario de Hamas, acusado de ser un apóstata», detalló el legislador Ahmed Tibi, según publicó el diario israelí Haaretz. «Lo que sucede en el campo de Yarmuk es un crimen contra la humanidad», y tanto los países árabes como la comunidad internacional deben estar «avergonzados», añadió Tibi. Hace una semana que el grupo jihadista controla gran parte del campo de refugiados y las milicias palestinas resisten de forma humanitaria.