Una delegación de la DAIA, participó, invitada por el Arzobispado de Buenos Aires, el 1 de enero, en la Catedral Metropolitana, de la Jornada Mundial de la Paz 2015, que llevó por lema “No esclavos, sino hermanos”. En una Catedral repleta, la conmemoración estuvo a cargo del Cardenal Mario Aurelio Poli, Arzobispo de Buenos Aires y Primado de la Argentina, quien estuvo acompañado entre otros prelados, por el Nuncio Apostólico en la República Argentina (embajador del Vaticano), Monseñor Emil Paul Tscherrig, y el Obispo Auxiliar de Buenos Aires, Monseñor Joaquín Mariano Sucunza. En su discurso, el Cardenal Poli, mencionó que la gran mayoría de la concurrencia, estaba allí, recordando al ex Cardenal, Mario Jorge Bergoglio, actual Papa Francisco, y que agradecía la presencia de Monseñor Tscherrig, en representación del Sumo Pontífice. A continuación, el Cardenal Poli, luego de presentar a otros importantes sacerdotes dijo: «Quiero agradecer también a los representantes de la comunidad judía (aplausos sostenidos) que nos están acompañando en este día. Muchas gracias. Ellos también quieren la Paz, y lo dicen con una palabra tan linda: SHALOM. Que esta bendición que representa la Paz, se haga extensiva en todo el año a toda las familias de la Nación Argentina”. Al finalizar la celebración, se acercó hacia donde estaban el presidente de la DAIA Julio Schlosser y su Señora y el secretario de Relaciones Interconfesionales de la entidad, Alberto Zimerman, el rector de la Catedral, Pbro. Alejandro Russo, quien les solicitó que no se retiren, porque, luego del paseo por la Catedral, el Cardenal los quería saludar. Efectivamente, el Cardenal Poli, Monseñor Tscherrig, y Monseñor Sucunza, se acercaron, saludaron y conversaron unos instantes con Schlosser, su señora y Zimerman.
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