PRENSA

Saber aceptar el derecho del otro. Por el rabino Daniel Goldman

Tan solo el pasado domingo por la tarde, en los jardines del Vaticano, el papa Francisco, íntegro líder a nivel planetario, retomó el sensato desafío, convocando a Shimon Peres y a Mahmoud Abbas, para que la plegaria ingrese en el espíritu de armonía y en el alma de los mandatarios, de modo tal que vuelva a revalorarse el sentido del diálogo, en lugar de la contienda inconducente. Hace dos semanas, quien fuera el Cardenal de la Argentina, se internó en la Tierra Santa de las tres religiones de raíz abrahámica, páramo sagrado de nuestras creencias, y uno de los rincones más conf lictivos de esta aldea global, para testimoniar con su catalizadora presencia, que ciertamente el mejor modo de superar los densos conflictos territoriales es aceptando al otro en sus genuinos derechos, en los valores del reconocimiento, y en el absoluto respeto de ser iguales y también diferentes. Esta acción de encuentro venimos ejerciéndola en nuestro país desde hace décadas. Y con orgullo debemos sostener que el diálogo interreligioso se transformó en paradigma de nuestra argentinidad.