PRENSA

Frustran un atentado terrorista en un ónmibus que circulaba cerca de Tel Aviv

A poco más de un año del último atentado contra un colectivo, el pánico ante el eventual regreso a los tiempos de los ataques terroristas en los que el blanco era el transporte público, volvió a conmover ayer a Israel, cuando en el inicio de la tarde, en un ómnibus que transitaba por Bat Yam, en cercanías de Tel Aviv, explotó una mochila escondida detrás de un asiento del área trasera del vehículo. No hubo que lamentar víctimas, pero podría haber sido una tragedia, dijo un vocero policial. Sólo la rapidez de reflejos de un pasajero que dio la alarma y la rápida reacción del conductor, que hizo descender a los pasajeros, evitó lo peor. El desarrollo del episodio no era claro hasta anoche, pero la fuente de seguridad se refirió al hecho como «un ataque terrorista». Para ello se basó en el examen de los explosivos hallados en la escena. Según algunos análisis periodísticos, el atentado podría tener una incidencia negativa en el largo y engorroso camino de las tratativas de paz entre israelíes y palestinos. Según el jefe de la policía, Yohanan Danino, «el incidente de Bat Yam vuelve a mostrarnos que la amenaza del terrorismo está latente, especialmente en estos días en los que se desarrollan nuevos intentos tendientes a encaminar el diálogo de paz».