PRENSA

Dorit Shavit: «Esperamos que no sean ingenuos con Irán»

La nueva embajadora de Israel, Dorit Shavit, llegó hace menos de dos meses a Buenos Aires y ya le tocan momentos turbulentos. «Esperamos que el Gobierno no sea tan ingenuo y vaya a creer que Irán ayudará en la causa del atentado contra la AMIA», reflexionó, ante el inminente inicio de las negociaciones entre la Argentina y el régimen de Teherán.

En lo que se interpretó como un mensaje a la Casa Rosada, advirtió que «hay una intención de dilatar la causa judicial, ya que es muy difícil pensar en la buena voluntad» iraní para esclarecer el crimen que les costó la vida a 85 personas.

No fueron las únicas advertencias que estableció Shavit en su vínculo con la Argentina. «Hay que tomar con cuidado la presencia de Irán en América latina. Espero que después de dos atentados la Argentina tome las medidas suficientes para saber exactamente si hay o no elementos terroristas en el país», expresó Shavit a LA NACION en su despacho de la embajada de Israel, que tiene una fuerte custodia policial.

La flamante embajadora confía en que, pese a todos los obstáculos, Israel y la Argentina profundizarán sus relaciones. Y desea que Cristina Kirchner visite Tel Aviv para reunirse con las autoridades de su país. La decisión de Israel de enviar a Shavit no es casual: tiene un alto rango dentro de la Cancillería, ya que fue directora de Asuntos de América latina y conoce bien el terreno.

-¿Cuáles son sus objetivos como embajadora en la Argentina?

-Ésta es la primera embajada de Israel que se abrió en América latina. Queremos profundizar las relaciones y seguir con visitas, acuerdos, cooperación cultural y comercio. Esperamos que haya vuelos directos entre Buenos Aires y Tel Aviv.

-Su gobierno, sin embargo, se mostró decepcionado por el diálogo que la Argentina abrió con Irán por la causa AMIA.

-El atentado a la AMIA fue contra una institución de la Argentina. Para Israel es muy importante hallar a los criminales y culpables y castigarlos. No sé cómo va a terminar este diálogo con Irán, que para nosotros es un enemigo estratégico. Es muy difícil creer que llegue a este diálogo con manos limpias. Irán continuará con su táctica de dilatar.

-¿Por qué no creen en la buena voluntad de Irán?

-Es muy difícil pensar en la buena voluntad de Irán, porque ellos desarrollan energía nuclear, financian proyectos armamentísticos y ayudan a organizaciones terroristas, como Hamas y Hezbollah, y al régimen sirio. La intención es dilatar en el tiempo la causa AMIA.

-¿Les tomó por sorpresa el diálogo?

-La Argentina no tenía por qué avisar a Israel de ello porque es una causa de un atentado contra ciudadanos argentinos y es una cuestión interna del país. Pero hay un atentado que sí involucra a Israel y es el perpetrado a su embajada en 1992.

-¿Ven voluntad del Gobierno de avanzar en la investigación?

-No lo sé. El caso de la embajada lo tomó la Corte y es otro proceso. Estamos esperando y mi tarea es agilizar esa causa y hablar con el Gobierno para que se clarifique ese atentado.

-El titular de la AMIA, Guillermo Borger, dijo que el diálogo con Irán genera un «terreno fértil» para otro atentado.

-No tengo información. Pero Irán tiene una presencia muy grande en América latina y una influencia muy fuerte en Venezuela, Nicaragua, Bolivia. Puede trasladar a esta región criminales de Hezbollah. Irán dijo que quiere borrar del mapa a Israel y ha estado involucrado en muchos atentados. Debemos tomar con cuidado su presencia en la región. Hay que abrir los ojos.

-¿Cree en el peligro de un tercer atentado?

-No lo sé. Sólo puedo prevenir. No sé nada de la presencia de Irán en la Argentina. Espero que después de dos atentados el país tome medidas suficientes para saber exactamente si hay o no elementos terroristas.

-¿Cómo ven el acercamiento de la Argentina con Chávez?

-Venezuela cortó las relaciones con Israel desde 2009, así que no sé mucho de Venezuela. Es natural que la Argentina tenga vínculos con Venezuela. Sólo esperamos que este vínculo con Chávez no dañe a las relaciones con Israel.

-¿Las relaciones con Israel están opacadas por el diálogo con Irán y por la decisión argentina de reconocer al estado Palestino?

-Creemos en un diálogo abierto con el gobierno argentino. Israel quiere tener un diálogo directo con Palestina, así como para la Argentina es importante tener un diálogo con Gran Bretaña por Malvinas.

-¿Le llama la atención el aumento de las relaciones comerciales entre la Argentina e Irán?

-Irán es un país grande y rico. Pero hay que advertir sobre las cuestiones políticas.

-La comunidad judía dice que la cooperación sólo se debe limitar a que entregue a los acusados.

-Así empezó el diálogo planteado por la Argentina. Hay diferencias, pero vamos a continuar con la amistad y tratar de mejorar las relaciones. Esperamos que la Presidenta pueda visitar Israel, como lo hizo nuestro presidente hace dos años.