PRENSA

La comunidad judía rechazó dialogar con Irán

No hubo titubeos ni retaceo de gestos a la hora de fijar una posición común. Es más: todos aceptaron posar en una foto. Las autoridades de la AMIA, la DAIA y 21 familiares de las víctimas del atentado contra la mutual judía rechazaron tajantemente el diálogo abierto entre Irán y la Argentina para avanzar en la investigación judicial, y destacaron en forma unánime: «La única oferta aceptable de cooperación iraní es la entrega de los acusados por el ataque». En un gesto sin precedente desde que ocurrió el atentado contra la AMIA, el 18 de julio de 1994, buena parte de los familiares de las víctimas, la DAIA y la AMIA se unieron para firmar un documento y establecer que no aceptarán la idea de una negociación entre Irán y la Argentina. La presidenta Cristina Kirchner aceptó hace una semana en la ONU dialogar con Teherán para acordar las condiciones de juzgamiento de los siete funcionarios y ex funcionarios del régimen de Mahmoud Ahmadinejad que la justicia argentina investiga por su presunta vinculación con el atentado que dejó 85 muertos. «No debemos hacerle el juego a un régimen que busca mejorar la penosa imagen que tiene frente al mundo, ya que hacerlo podría dar como resultado que esa imagen se traslade a nuestro país. Que no pierda de vista que Irán fue el país agresor y la Argentina el país agredido, y que la justicia de nuestro país determinó con total claridad graves imputaciones a quienes señala como los responsables», dice el documento. Aunque sin nombrarla de manera directa, el mensaje está dirigido a Cristina Kirchner y alienta a la Argentina a imponer mayor dureza con Irán. El sustento de esta exigencia tuvo una explicación precisa en el comunicado: «Las autoridades iraníes no sólo se han negado reiteradamente a ello [a ser juzgados], sino que han agraviado públicamente a las instituciones de nuestro país con calificativos inaceptables». Además, la DAIA, la AMIA y los familiares destacaron que, en una «burla» a la justicia argentina, las autoridades de Irán han «premiado» a algunos de los acusados con importantes cargos en el gobierno iraní. Se referían al ministro de Defensa iraní, Ahmad Vahidi, que tiene pedido de captura de la Interpol y el año pasado visitó Bolivia. El documento se firmó en 15 minutos. No hubo debate en el edificio de la calle Pasteur y hubo coincidencia plena en destacar que los familiares de las víctimas del ataque, la AMIA y la DAIA no están dispuestos a avalar «una nueva maniobra iraní cuyo único objetivo es garantizar la impunidad de los prófugos e impedir que se haga justicia». Para los firmantes del documento la propuesta iraní «es una clara maniobra de dilación y de posicionamiento diplomático a nivel internacional», y pidieron no ser «sus ingenuos cómplices».