La DAIA, representación de la comunidad judía argentina, elogia la condena impartida a quienes fueron responsables del plan sistemático de robos de niños, niñas y bebés, impuesto durante la última dictadura militar. El esperado veredicto, comunicado en el día de ayer por el Tribunal Oral Federal Nº 6, constituye un hecho trascendente en la lucha por los Derechos Humanos y un mensaje contra toda forma de impunidad.
Las penas notificadas a los criminales son un llamado de atención acerca de la imprescriptibilidad de los delitos de lesa humanidad y también un homenaje a quienes impulsaron y sostuvieron las banderas de justicia durante largos periodos de indiferencia orientados a instaurar el olvido.
El 5 de Julio de 2012 quedará, sin dudas, en la historia de nuestro país, como una jornada en donde la búsqueda persistente de Justicia pudo más que la venganza y la impunidad. Y será motivo de orgullo para quienes sabemos que la bandera de los Derechos Humanos no puede ser quebrada, ni siquiera por el paso del tiempo.