PRENSA

Visto & oído

La aparición de Marine Le Pen –la líder del ultraderechista Frente Nacional francés– caracterizada como una militante nazi en una proyección durante los conciertos que Madonna brindó en París generó una polémica política en todo el país galo. Durante la canción “Nobody Knows Me”, las pantallas mostraron a Le Pen con el típico bigote hitleriano y una esvástica en la frente, lo que despertó una feroz reacción del partido y sus adherentes. La propia Le Pen se expresó: “Las cantantes que envejecen deben hacer que hablen de ellas. Se puede entender que recurran a estos extremos”, consideró la francesa.