PRENSA

Cortocircuitos en la Rosada por la propuesta de Irán

El golpe de efecto que terminó dando el inesperado comunicado de la cancillería iraní al gobierno argentino en la víspera del 17 aniversario del ataque terrorista a la AMIA, que se cumplió ayer, generó fisuras entre la dirigencia local y contradicciones en el discurso de los sorprendidos funcionarios nacionales . El texto llegado de Teherán a Buenos Aires ofreció colaboración “para un diálogo constructivo” que lleve al esclarecimiento de la causa AMIA. Ayer a la mañana, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, señaló por radio que es “una posición irreductible de la Argentina” la que sostiene que “con el terrorismo no se negocia”, y sostuvo que el Gobierno sabe que “la salida es por la ley y por la justicia”. Aunque Fernández propuso analizar de qué se trata el mensaje que está queriendo hacer llegar el gobierno de Mahmud Ahmadinejad, y dijo que sobre ello también debía actuar la Cancillería, afirmó que la Justicia local ya había tomado una “determinación”. Habló entonces de “determinadas personas” –en referencia al grupo de iraníes acusados en Buenos Aires y con pedido de captura internacional– que conforman lo que se suponía habían sido los “autores e intelectuales y materiales del hecho”.