PRENSA

El Papa homenajeó a un cardenal acusado de nazi

Desde Zagreb, la capital de Croacia, en la que ayer inició una visita de dos días que concluirá hoy, el Papa lanzó un vasto ataque contra el laicismo imperante en Europa, al afirmar que “si la religión y la moral son relegados al ámbito privado”, como “pretende el pensamiento moderno más en boga”, “Europa seguirá perdiendo terreno”. Asimismo, en un gesto muy polémico que ya levantó críticas, Benedicto XVI fue a rezar en la tumba del beato cardenal Aloisio Stepinac, un acusado de ser pronazi. En un diálogo preestablecido con los periodistas durante el breve viaje de una hora y media en avión entre Roma y Zagreb, el Pontífice consideró “justo, lógico y necesario” el ingreso, en 2012, de Croacia a la Unión Europea. También habló de la “crisis de Occidente”. Al cumplirse veinte años de la independencia de Croacia de la Federación Yugoslava, secesión que dio lugar a una guerra civil con Serbia, que hegemonizaba el sistema de seis repúblicas federales creado por el mariscal Tito, que era croata, el presidente agnóstico croata Ivo Josipovic le agradeció a Benedicto XVI que la Santa Sede hubiera sido el primer Estado que reconoció su independencia.