Puede decirse que la elección para elegir las nuevas autoridades de la Asociación Mutual Israelita para los próximos tres años tuvo ayer momentos dramáticos . Hasta casi la madrugada, los sectores laicos intentaron desbarrancar del poder a la dirigencia ortodoxa de la mutual judía que gobierna desde 2008. Pero no pudieron lograrlo. Aunque ninguna de las fuerzas pudo ganar en primera instancia al no sacar ninguna el 51% de los votos, la lista 4 del Bloque Unido Religioso (BUR) logró nuevamente quedarse con la primera minoría , con tan sólo 530 votos de diferencia, frente al sector Acción Plural.
Ahora comienza a desarrollarse en la AMIA una dura pulseada para lograr alianzas de cara a su próxima Asamblea Electoral, de la que debería surgir el próximo presidente y su comisión directiva. Lo que ayer se eligió fueron 90 electores para las distintas listas.
Lo curioso es que la fuerte campaña laica no melló la movilización de los ortodoxos. Acusados de gestionar un gobierno de la mutual “no inclusivo” en temas como matrimonios mixtos, entierros y otros reconocimientos de judíos conversos a lo que se niegan, los ortodoxos sacaron incluso más votos que en la elección pasada.
El BUR logró ayer el 41,11% de los votos (4.360 votos), y en la cabeza de su lista figura Ángel Barman, hombre del riñón del rabino Samuel Levin, aunque de costumbres más abiertas que la ortodoxia cerrada. El número les permitió obtener 37 electores.
En segundo lugar, quedó Acción Plural, de Luis Grynwald. AP obtuvo el 35,56% de los sufragios (3.830) y 32 electores. Muy lejos vienen el Frente Comunitario, con el 20% (2.183 votos) y 18 electores e Iajad, con el 3,33% (366 sufragios) y 3 electores. Anoche los partidarios del BUR se lanzaron al unísono a celebrar con saltos y bailes de alegría.
Anoche ninguno de los candidatos quería dar por cerrado lo que ocurrirá con ellos. Pero el escenario, aunque cambiante como en la de 2008 se presentaba a grandes rasgos de la siguiente manera. Oscar Olender de Iajad, le dio señales a los ortodoxos para darles su voto.
Entre tanto, el Frente Comunitario se encontraba dividido. Un alto dirigente consultado señaló que su plataforma electoral coincidía con la de Acción Plural, por estar de acuerdo en la mayor cantidad de puntos. Aún así dentro del Frente había sectores partidarios de darle su voto a Grynwald y otros que no. De hecho, el Frente está compuesto por miembros de Avodá, el partido en el que militaba Grynwald, y en el que quedaron recelos por su partida. Y también miembros de AMIA es de Todos, que lidera el rabino Sergio Bergman y quien hace tres años torció la elección en favor de los ortodoxos que habían sacado el 38% de los votos. En la dirigencia de AMIA es de Todos, hoy recelan también del presunto acercamiento a Acción Plural al empresario K Sergio Spolsky, que en el entorno de Grynwald niegan.
“Necesitamos de los gobiernos de turno pero ya tuvimos kirchnerismo en exceso durante la gestión actual”, señaló a Clarín el mismo referente del Frente.
La elección de ayer fue histórica en el sentido de que ambas tendencias lograron movilizar su tropa a través del voto con proyectos sobre la identidad y práctica judaica bien diferente. Votaron 10.741 socios de AMIA de un total de 20.500. Con sus rigurosos atuendos negros, los enormes sombreros y largas barbas, los “militantes” del BUR se hicieron sentir en toda la ciudad. Es curioso porque del total de entre 100.000 y 150.000 judíos que viven en capital, sólo el 10% es ortodoxo. Pero su fuerza radica en la disciplina y obediencia a sus rabinos.
Hubo en un momento algunos incidentes. Ayer, cuando la tensión era evidente en el salón de la planta baja de Pasteur al 600, y Acción Plural superaba por lejos al BUR –que después lo empató- se enfrentaron a empujones.