PRENSA

La Presidenta recibió a dirigentes de la comunidad judía con motivo del inicio del año nuevo judío

El encuentro se llevó a cabo en el despacho presidencial y acompañaron a la jefa de Estado el canciller Héctor Timerman y el secretario de Culto, Guillermo Oliveri, informaron fuentes de Presidencia de la Nación. La delegación judía estuvo integrada por el titular de la DAIA, Aldo Donzis; el secretario General, Fabián Galante; el director ejecutivo, Jorge Elbaum y la vicepresidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Rosa Roisinblit. También estuvieron la sobreviviente del Holocausto y Madre de Plaza de Mayo, Línea Fundadora, Sara Rus; el director del Congreso Judío Latinoamericano, Claudio Epelman, y los rabinos de la Comunidad Bet-El, Daniel Goldman y Silvina Chemen. A través de un comunicado la DAIA informó que Donzis se refirió «a la importancia que tiene la festividad para la comunidad judía» y la reunión sirvió «para compartir un momento de buenos augurios y de optimismo en el trabajo y la fe de nuestra sociedad y nuestra patria». El año nuevo 5.771 comienza con la salida de la primera estrella de hoy y la festividad se extiende por dos días. Rosh Hashaná significa «Cabeza de Año» y es el inicio de un período de diez días (de arrepentimiento) que culminan con el Iom Kipur (Día del Perdón), la fecha más sagrada del calendario hebreo. En ese sentido la DAIA indicó que se encuentran vigentes las Leyes Nacionales sancionadas por el Congreso de la Nación números 24.571 y 25.151 por las cuales Rosh Hashaná y Iom Kipur «se declaran días no laborables y remunerativos para todos los habitantes que profesen la religión judía». En su artículo 1§ la Ley 24.571/95 especifica: «Declárese día no laborable para todos los habitantes de la Nación Argentina que profesen la religión judía los días de Año Nuevo (Rosh Hashaná) dos días y el Día del Perdón (Iom Kipur) un día». Por su parte, la Ley 25.151/99 aclara que «los trabajadores comprendidos en esta ley que no prestaren servicios en las festividades religiosas indicadas en las mismas, devengarán remuneración y los demás derechos de la relación laboral como si hubiesen prestado servicio». En tanto la comunidad judía argentina realizará una oración por la Presidenta y su Gobierno para que «Dios los inspire y lleven a buen cometido la misión tan sagrada y eleva para la que fueron elegidos».