En doce oportunidades, el Parlamento israelí interrumpió con aplausos el discurso brindado ayer por un emocionado Silvio Berlusconi. Es que el primer ministro italiano calificó a Israel como «el mayor ejemplo de democracia y libertad en Medio Oriente» y defendió la operación Plomo Fundido en Gaza, catalogándola de «justa».
Además, señaló que para él «Italia es el hermano mayor de Israel» y reconoció en su homólogo israelí, Benjamín Netanyahu, «un líder valiente». Como si fuera poco, el premier italiano no pudo contener las lágrimas (foto), cuando Netanyahu relató aquella anécdota en que la madre de «Il Cavaliere», Rosa, evitó que un policía alemán arrestara a una niña judía en un tren, poniendo en riesgo su propia vida. «Puede matarme, pero mire las caras de las personas que viajan. Le prometo que ellos no permitirán que escape vivo», fueron las palabras de la mujer en aquella instancia.