El Instituto Nacional contra la Discriminación (Inadi) advirtió que el secretario general de la Unión de Docentes Tucumanos (UDT), Carlos Arnedo, incurrió en una conducta discriminatoria contra la colectividad judía, «lo que entraña un alto riesgo de dar lugar a actos concretos de antisemitismo».
A fines de 2008, la filial Tucumán de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) recogió declaraciones del sindicalista en el programa Trabajo Global, conducido por Alberto Ríos, que transmite el Canal 5 de ATS. Según el escrito entregado a la delegada del Inadi, Graciela Cárdenas, Arnedo repudió que el Poder Ejecutivo interviniera la junta de clasificación docente del área Técnica y Agrotécnica. «Acá esta política judia nazi que forma parte de un sinceramiento propio de quienes hoy persiguen a los que tenemos otra actitud de estar a la par de los trabajadores» (sic).
El titular de la DAIA, Jaime Salamon, repudió esas declaraciones, que consideró mendaces, malintencionadas y xenófobas. El expediente llegó a Buenos Aires, que emitió un dictamen firmado por el vicepresidente del Inadi, Pedro Mouratian. En los argumentos, el instituto resaltó que Arnedo no negó sus expresiones públicas. Por el contrario, según el documento, el denunciado concluyó su descargo afirmando: «advierto y rechazo la existencia de políticas judías antidemocráticas en nuestro país y en nuestra provincia».
Asimismo, el Inadi resaltó que «la conducta denunciada constituye una práctica discriminatoria, toda vez que el grado y el tenor de la generalización efectuada por el denunciado (Arnedo) respecto de la colectividad judía colabora a la difusión de un estereotipo negativo sobre la colectividad».
Por ello, el Inadi recomendó la difusión de una respuesta por parte de las autoridades de la DAIA (filial Tucumán). «Por el mismo tiempo y en el mismo medio masivo de comunicación que el denunciado», aconsejó el asesor legal del Inadi, Martín Oscar Viceconte.